La artritis viene de lejos. El fósil de un dinosaurio llamado Pliosaurio muestra signos de haber sufrido artritis durante varios años antes de morir. Judyth Sassoon , paleontóloga de la Universidad de Bristol (Reino Unido), notó síntomas de erosión en la articulación izquierda de la mandíbula del Pliosaurio, un problema que determinó el desplazamiento del maxilar inferior hacia un costado. La experta encontró evidencia de que el animal vivió con las mandíbulas dañadas por muchos años. El fósil del Pliosaurio, que vivió durante el Jurásico superior, mide 8 metros de largo. Cuenta con una cabeza similar a la de los cocodrilos, un cuello corto y un cuerpo con forma de ballena que le permitía desplazarse rápidamente por el agua. Sus dientes medían 20 centímetros y la mandíbula era muy poderosa. Los especialistas creen que estos dinosaurios se alimentaban de peces, calamares y otros reptiles marinos. Estaban al tope de la cadena alimenticia por lo cual ninguna otra especie se