Ver pornografía desactiva el neurocórtex, una zona del cerebro encargada de procesar los estímulos visuales. Esto no significa en ninguna medida que este tipo de contenido pueda quitarle la visión, afirman investigadores de la Universidad de Gronigen en Holanda.
Concretamente, dice los autores del estudio, ver una película o realizar una tarea visual envía un considerable flujo sanguíneo a esta zona del cerebro. Sin embargo, cuando las películas son sexualmente explícitas esto no sucede. Entonces el cerebro releva la sangre de esa zona, enviándola a otra parte del cerebro, como una manera de ahorrar energía.
“Cuando una persona realiza una tarea visual es importante mantener la concentración y por lo tanto activar la zona del cerebro responsable del procesamiento visual, pero cuando estás viendo películas sexuales, esto no es necesario, porque sabes exactamente lo que está sucediendo”, indicó el uroneurólogo Gert Holstege a la revista Live Science.
El estudio coincide con lo que se pensaba antes; de que el cerebro o está excitado sexualmente o está en un estado de ansiedad. Algo que podría explicar por qué las mujeres que tienen bajos niveles de deseo sexual generalmente tienen altos niveles de ansiedad
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