México, DF. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no se pronunciará por el momento sobre la compra del Boeing 787 que será utilizado para transportar al Presidente de la República, precisaron voceros de la dependencia, los cuales agregaron que en la industria aeronáutica es común que cuando un modelo presenta fallas, la empresas constructora detiene la fabricación de las naves hasta que obtiene la licencia correspondiente para volar y reanudar la producción de sus aviones.
Los informantes agregaron que la decisión del gobierno de Estados Unidos de ordenar la cancelación temporal de los vuelos del Boeing 787 no significa que tenga que modificarse el contrato de adquisición de la aeronave por un costo total de 239 millones de dólares, máxime que la entrega del aparato está prevista a mediados de 2014.
Comentaron que cuando un avión presenta fallas, en la industria aeronáutica es normal que se corrijan los problemas y luego, viene un período de pruebas hasta que el asunto queda solucionado.
Comentaron que el gobierno mexicano –la Sedena participa en la negociación porque la nave se integrará a la flota del Estado Mayor Presidencial- adquirirá el avión a través de un arrendamiento directo, para lo cual, la Secretaría de Hacienda ya etiquetó los recursos correspondientes.
Este miércoles, Estados Unidos ordenó la cancelación temporal de los vuelos de los Boeing 787, tras dos incidentes en Japón en donde las naves tuvieron que realizar aterrizajes de emergencia, debido a fallas en las baterías de los llamados "Dreamliner".
"Antes que se aprueben nuevos vuelos, los operadores de aeronaves Boeing 787 registrados en Estados Unidos deben demostrar a la FAA (Administración Federal de Aviación) que las baterías son seguras", dijo la agencia regulatoria en un comunicado.
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